viernes, 2 de abril de 2010

primavera

- ¿Diga?
- Hola, ¿está Dios?
- Sí.
- Que se ponga.
- ¿De parte de quién?
- De un conocido.
- A ver, un momento.
- ...
- ¿Si?
- Hola, Dios.
- Hola, mortal.
- Oye una cosa, ¿por qué coño tiene que pasar esto en primavera?
- Es la Ley de la compensación.
- ¿Cómo?
- The compensation's law of primavera.
- ¿Compensation de qué?
- De esto.
- Ah.
- Así lo diseñé y así será por los siglos de los siglos.
- Ya, pero ¿era necesario tanto bicho?
- A callar.
- Es que lo veo desproporcionado...
- ¡Sht!


- Ya, ya... pero ¿tú quieres decir que tanto polen...?
- ¡Sht!

- Juegas sucio, Dios, juegas sucio.
- Ala, cuelga.
- Volveremos a hablar.
- Será si yo quiero.
- Adiós.
- A mi.

4 comentarios:

  1. Joder, el primer culo tiene frio, pobrecilla.

    Y por cierto, a mi quién me compensa?

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  2. Felicidades por el blog tex, de vez en cuando vengo para ver si has publicado alguna entrada nueva que me encantan, son buenísimas :)

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  3. La primavera la sangre altera! (jo crec que a tu et bull XD)

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  4. Disimulando: ya, tienes razón, pero la minifalda en hombres aún no está muy bien vista. Yo no le puedo hacer nada.

    Adrián: gracias, aquí estaremos.

    Alba: la primavera no altera la sangre, altera otra cosa.

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